Una Ballena Jorobada en
el Río de la Plata
Reproducimos el artículo publicado por el Instituto de conservación de
Ballenas.
El día posterior a la difusión de la noticia en los
medios gráficos (lunes 3 agosto de 2015), nos hicimos presentes con el Lic Hugo
P. Castello del laboratorio de Mamíferos Marinos del Museo Arg. de Ciencias
Naturales, “Bernardino Rivadavia” , para constatar la información errónea que
circulaba en los medios, nombrando a la ballena perdida, como “ballena minke” Balaenoptera acutorostrata, cuando en
realidad, y como se podía ver en un primer video, cuando el animal se voltea
sobre su lomo, se observa que pertenecía a la especie "Megaptera novaeangliae", lo que podría citarse como uno de los primeros ingresos de este especie de cetáceo,
a las aguas del Río de la Plata, específicamente, en el área de las dársenas del puerto
Los anteriores
registros indican ballenas adultas varadas al sur de las costas bonaerenses y una ballena jorobada en el Río Uruguay.
Muy amablemente, el
encargado del operativo por parte de la Prefectura Naval Arg. Prefecto Gómez,
nos posibilita el embarque en uno de los semirrígidos de esta entidad, para
poder fotografiar y documentar el avistaje. Las condiciones climáticas del día
lamentablemente hicieron imposible la maniobra.
Federico Serino,
Asociación Amigos del Museo Arg. De Ciencias Naturales. Proyecto Planeta Azul.
Una Ballena Jorobada en
el Río de la Plata
Buenos Aires, 6 de agosto de 2015 - Esta semana
una ballena jorobada fue avistada en el Dique 4 de Puerto Madero de la Ciudad
de Buenos Aires. Las autoridades de la Prefectura Naval Argentina y la
Secretaría de Ambiente y Desarrollo Sustentable de la Nación pusieron en marcha
un operativo para ayudarla a salir del área portuaria hacia el Río de la Plata
por sus propios medios. Existen casos similares para esta especie en Argentina
y otros sitios del mundo.
Una ballena jorobada
juvenil ingresó al dique 4 de Puerto Madero de la ciudad de Buenos Aires el
pasado lunes 3 de agosto. De inmediato, la Prefectura Naval Argentina y
la Secretaría de Ambiente y Desarrollo Sustentable iniciaron
un operativo que contó con el apoyo técnico de Miguel Iñiguez, miembro de
la Fundación Cethus y Delegado de Argentina ante
la Comisión Ballenera InternacionalFoto infobae |
Integrantes del Instituto de Conservación de Ballenas estuvieron
presentes en el lugar. “Fuimos alertados de esta situación y nos pusimos en comunicación
con las autoridades y con Miguel Iñiguez para conocer los detalles del
operativo”, explica Roxana Schteinbarg, coordinadora ejecutiva del
ICB, y agrega: “Nuestro equipo técnico acordó que la decisión de acompañar a la
ballena e intentar redirigirla hacia el Río de la Plata y desde allí hacia el
mar, es lo más apropiado. Colaboramos brindando información a los medios de
comunicación y recalcamos que el operativo en curso es lo más recomendado,
contrariamente a la opción de utilizar medios mecánicos para retirarla del
lugar”.
"Ballena Jorobada" o "Ballena Yubarta" (Foto WEB) |
Las ballenas tienen
hábitos migratorios. Durante el verano se alimentan en aguas frías y en el
otoño migran hacia aguas más cálidas para tener a sus crías. Las ballenas
jorobadas de la población del Atlántico Sudoccidental migran desde las aguas
Antárticas hacia las aguas cálidas del norte de Brasil siguiendo probablemente
el borde de la plataforma continental. Muchos se han preguntado cómo entonces
esta ballena pudo llegar hasta Puerto Madero.
El Dr. Mariano
Sironi, Director Científico del ICB, explica que "en ocasiones
algunas ballenas ingresan a cursos de agua dulce con conexión al mar. Pese al
avanzado sistema de orientación que poseen, a veces se pierden y como
consecuencia se alejan de su hábitat natural, que es el océano. Esto es más
probable aun en el caso de animales jóvenes como éste, que tienen poca
experiencia siguiendo la ruta migratoria después de separarse de sus madres”.
La Dra. Marcela Uhart, co-directora del Programa de Monitoreo Sanitario Ballena Franca Austral de Chubut, describe que “es importante que las ballenas retornen a su medio natural en poco tiempo ya que en el agua dulce su salud se va deteriorando progresivamente. Por un lado, la piel, que es muy delicada y está adaptada al agua salada, pierde su capacidad de controlar infecciones y de cicatrizar heridas. Al mismo tiempo, el agua dulce afecta los riñones y deshidrata a los animales”. El Dr. Sironi agrega que "las ballenas necesitan salir a la superficie para respirar. Como es sabido, el agua salada favorece la flotabilidad, por lo que realizar el ascenso en agua dulce les exige un mayor gasto de energía."
Todos estos factores contribuyen a aumentar el estrés que sufre el animal fuera de su hábitat. Por ello, lo que se recomienda en estos casos es tratar de reorientarla con la ayuda de pequeñas embarcaciones como lo hizo el personal de Prefectura Naval. El objetivo es lograr que el animal vuelva al mar por sus propios medios sin intentar capturarlo y transportarlo. Su captura con el fin de salvarla, además de las complicaciones logísticas enormes que presentaría, incrementaría notablemente el estrés poniendo además en riesgo la vida de la ballena.
Miguel Iñíguez pudo observar de cerca del animal desde las embarcaciones de Prefectura, e informó: "El animal no estaba en estado ideal. Se lo veía delgado y con lesiones en la piel que tal vez podrían ser producto del contacto con las embarcaciones o por los días que llevaba en el agua dulce". También declaró que que cuando la ballena salió a respirar cerca del bote, se pudo advertir que el soplido era limpio y sin olor. (La Nación)
Hay registros de situaciones similares con la misma especie ingresando en cursos de agua dulce. En julio de 2012, una ballena jorobada ingresó por el Río Uruguay y fue observada por pescadores de la localidad de Villa Paranacito (Entre Ríos). En ese caso se efectuó un operativo similar pero a los pocos días su cuerpo fue encontrado cerca de la localidad de Campana, en el Río Talavera. Otro caso fue el de una ballena jorobada hembra junto a su cría, bautizadas Delta y Dawn, que en mayo de 2007 ingresaron en la bahía de San Francisco, California y de allí subieron unos 170 km por el río Sacramento. Se considera el caso de mayor distancia recorrida por la especie en un curso de agua dulce. Luego de varios días, regresaron al mar usando el mismo operativo de arreo sin presión con embarcaciones pequeñas que involucró a investigadores del Marine Mammal Center de Sausalito y personal de gobierno y seguridad naval de California.
La ballena vista en Puerto Madero fue observada por última vez el miércoles a las 4.20 hs desde las embarcaciones de la Prefectura en el área cercana a la Terminal de Cargas Internacional del Puerto de Buenos Aires. Allí estuvo todo el día martes y la noche del miércoles tras salir de la Dársena Norte. El viento del sudeste jugó en contra del operativo y por eso se esperó la bajante, para ver si esto facilitaba la salida de la ballena por el canal de navegación. Desde entonces un guardacostas de la Prefectura y otras embarcaciones continúan rastrillando el área y el operativo se amplió inclusive hasta el Canal Mitre. Estamos esperanzados de que haya sobrevivido y se encuentre nuevamente en su ruta hacia el mar.
La Dra. Marcela Uhart, co-directora del Programa de Monitoreo Sanitario Ballena Franca Austral de Chubut, describe que “es importante que las ballenas retornen a su medio natural en poco tiempo ya que en el agua dulce su salud se va deteriorando progresivamente. Por un lado, la piel, que es muy delicada y está adaptada al agua salada, pierde su capacidad de controlar infecciones y de cicatrizar heridas. Al mismo tiempo, el agua dulce afecta los riñones y deshidrata a los animales”. El Dr. Sironi agrega que "las ballenas necesitan salir a la superficie para respirar. Como es sabido, el agua salada favorece la flotabilidad, por lo que realizar el ascenso en agua dulce les exige un mayor gasto de energía."
Todos estos factores contribuyen a aumentar el estrés que sufre el animal fuera de su hábitat. Por ello, lo que se recomienda en estos casos es tratar de reorientarla con la ayuda de pequeñas embarcaciones como lo hizo el personal de Prefectura Naval. El objetivo es lograr que el animal vuelva al mar por sus propios medios sin intentar capturarlo y transportarlo. Su captura con el fin de salvarla, además de las complicaciones logísticas enormes que presentaría, incrementaría notablemente el estrés poniendo además en riesgo la vida de la ballena.
Miguel Iñíguez pudo observar de cerca del animal desde las embarcaciones de Prefectura, e informó: "El animal no estaba en estado ideal. Se lo veía delgado y con lesiones en la piel que tal vez podrían ser producto del contacto con las embarcaciones o por los días que llevaba en el agua dulce". También declaró que que cuando la ballena salió a respirar cerca del bote, se pudo advertir que el soplido era limpio y sin olor. (La Nación)
Hay registros de situaciones similares con la misma especie ingresando en cursos de agua dulce. En julio de 2012, una ballena jorobada ingresó por el Río Uruguay y fue observada por pescadores de la localidad de Villa Paranacito (Entre Ríos). En ese caso se efectuó un operativo similar pero a los pocos días su cuerpo fue encontrado cerca de la localidad de Campana, en el Río Talavera. Otro caso fue el de una ballena jorobada hembra junto a su cría, bautizadas Delta y Dawn, que en mayo de 2007 ingresaron en la bahía de San Francisco, California y de allí subieron unos 170 km por el río Sacramento. Se considera el caso de mayor distancia recorrida por la especie en un curso de agua dulce. Luego de varios días, regresaron al mar usando el mismo operativo de arreo sin presión con embarcaciones pequeñas que involucró a investigadores del Marine Mammal Center de Sausalito y personal de gobierno y seguridad naval de California.
La ballena vista en Puerto Madero fue observada por última vez el miércoles a las 4.20 hs desde las embarcaciones de la Prefectura en el área cercana a la Terminal de Cargas Internacional del Puerto de Buenos Aires. Allí estuvo todo el día martes y la noche del miércoles tras salir de la Dársena Norte. El viento del sudeste jugó en contra del operativo y por eso se esperó la bajante, para ver si esto facilitaba la salida de la ballena por el canal de navegación. Desde entonces un guardacostas de la Prefectura y otras embarcaciones continúan rastrillando el área y el operativo se amplió inclusive hasta el Canal Mitre. Estamos esperanzados de que haya sobrevivido y se encuentre nuevamente en su ruta hacia el mar.
Se puede reproducir
citando la fuente. © Instituto de Conservación de Ballenas
Megáptera Novaeangliae (Foto Infobae) |
Detalle de la cabeza del animal, donde se aprecian los nódulos caracterísiticos de la especie (Foto Infobae) |
Foto prensa Prefectura Naval Arg. |